Seño
r, no me corrijas con ira, *
no
me castigues con cólera;
tus
flechas se me han clavado, *
tu
mano pesa sobre mí;
no
hay parte ilesa en mi carne a causa de tu furor, *
no
tienen descanso mis huesos a causa de mis pecados;
mis
culpas sobrepasan mi cabeza, *
son
un peso superio r a mis fuerzas.
Mis
llagas están podridas *
y
supuran por causa de miᴗinsensatez;
voy
encorvado y encogido, *
todo
el día camino sombrío.
Tengo
las espaldas ardiendo, *
no
hay parte ilesa en mi carne;
estoy
agotado , deshecho del todo; *
rujo
con más fuerza que un león.
Seño
r mío , todas mis ansias están en tu presencia,
*
no
se te ocultan mis gemidos;
siento
palpitar mi corazón, †
me
abandonan las fuerzas, *
y
me falta hasta la lu z de los ojos.
Mis
amigos y compañeros se alejan de mí, *
mis
parientes se quedan a distancia;
me
tienden lazos *
los
que atentan contra mí,
los
que desean mi daño †
me
amenazan de muerte, *
todo
el día murmuran traiciones.
Pero
yo , como un sordo , no ' oigo; *
como
un mudo , no abro la boca;
soy
como uno que no ' oye *
y
no puede replicar.
En
Ti , Seño r, espero, *
y
Tú meᴗescuchará s, Seño r,
Dio s mío;
esto
pido: †
que
no se alegren por mi causa, *
que
, cuando resbale mi pie , no canten triunfo.
Porque
yo estoy a punto de caer, *
y
mi pena no se aparta de mí:
yo
confieso mi culpa, *
me
aflige mi pecado.
Mis
enemigos mortales son poderosos, *
son
mucho s los que me aborrecen sin razón,
los
que me pagan males por bienes, *
los
que me ataca n cuando procuro el bien.
No
me abandone s, Seño[
r; †
Dio
s mío , no te quedes lejos; *
ven
aprisa ' a socorrerme , Seño r mío , mi
salvación.
[(MÚSICA)]